Compré un QLED 55 modelo QE55Q7FAMTXXC en Junio de 2017, 2.065,17 € en el Corte Inglés. Ya el primer año daba algún síntoma de mal funcionamiento: perdía imagen un milisegundo, alguna zona de sombra en el lateral En Julio 2019 se empieza a ver doble imagen. Consulto con SAMSUNG y el Corte Inglés y me remiten al SAT al estar ya fuera de garantía. El SAT se lleva el televisor (previo desembolso por su retirada) y 15 días después me dan un presupuesto de 832 € con el diagnóstico de necesidad de cambio de panel. Obviamente, he tirado el televisor a la basura.
SAMSUNG es muy consciente de que esta vendiendo televisores QLED con paneles defectuosos en origen que antes o después harán inservible el aparato. Si es en el período de garantía legal se limitan (después de intentar convencerte que se ve perfectamente) a ponerte a la cola para cambiar el panel con lo que supone tener ya un aparato reacondicionado que esta "tocado". Y si es fuera del período de garantía sonrien a tu costa. Ni el productor, ni el vendedor quieren saber nada del tema. La atención al cliente es vergonzosa, es un maltrato continuo también por el servicio oficial de asistencia técnica que ya saben perfectamente los paneles defectuosos y no obstante te hacen incurrir en gastos, molestias y desplazamientos todos inútiles. Los clientes no les importamos nada y lo único que nos queda, en el mejor de los casos, es éste pataleo.
